lunes, 1 de julio de 2013

Los niños que roncan

                                 Por que roncan los niños pequeños 

El ronquido se origina como consecuencia de una resistencia al paso del aire a través de las fosas nasales y de la boca hacia la faringe. Los ronquidos, si bien son más frecuentes en adultos, también están presentes en el sueño de los niños.
La causa más frecuente en los niños es debido al aumento del tamaño de las adenoides, también llamadas vegetaciones, que puede o no estar acompañado de un aumento del tamaño de las amígdalas.
Esto origina una disminución y estrechez de la vía respiratoria que obstruye el paso del aire ocasionando el ronquido. Diversas malformaciones faciales, como una mandíbula pequeña o un maxilar estrecho, también pueden incrementar los ronquidos.
El ronquido simple en el niño cuando no va acompañado de otra sintomatología y no produce alteraciones en el sueño no significa que exista una enfermedad y no es necesario realizar ningún tratamiento ni prueba especial. En algunos casos, la estrechez de la vía respiratoria es tan grande que la cierra y colapsa produciendo unos episodios denominados apneas nocturnas, en cuyo caso se tratará de un síndrome de apnea nocturna. La apnea es la ausencia de respiración durante un tiempo determinado. Los padres observan cómo el niño deja de roncar durante unos segundos, terminando en un ruido fuerte con el que reanuda la respiración y el ronquido.
Durante estas apneas se pueden observar intentos y esfuerzos respiratorios. Esto hace que en ocasiones el niño se despierte por la noche y se altere el sueño. Para poder valorar y cuantificar la existencia de apnea nocturna se realizan unas pruebas como son una exploración endoscópica nasal y faríngea para observar directamente el tamaño de las estructuras endofaríngeas adenoideas y amigdalares y en ocasiones realizar un test del sueño, analizando durante una noche los episodios de ronquido y apneas. Con esta prueba, denominada polisomnografia, se cuantifica la frecuencia e intensidad de las apneas.
Cuando existen apneas nocturnas de repetición puede disminuir la concentración de oxígeno, siendo muy importante en estas etapas tan críticas para el desarrollo neuronal y cognitivo. La falta de respiración repetida durante la noche ocasiona un sueño no reparador que provoca problemas de aprendizaje, atención y comportamiento en niños.



Evaluación de las apneas
Está demostrado que el síndrome de apnea nocturna en niños puede alterar el crecimiento, puede provocar complicaciones cardiovasculares y alteraciones neurocognitivas y conductuales. Esto último se manifiesta en los niños con agresividad, hiperactividad, falta de concentración, retraso del lenguaje y rendimiento escolar bajo, entre otros. Es por esto que la Academia Americana de Pediatría recomienda descartar la presencia de apneas durante el sueño en niños con trastorno de déficit de atención e hiperactividad(TDAH).
Así, un niño que ronca por la noche, y que durante el día presenta problemas conductuales como los que hemos mencionado anteriormente, debería ser evaluado para descartar la presencia de apneas durante el sueño.
Si se constata la existencia de un síndrome de apnea nocturna, en la mayoría de casos se indicará la necesidad de extirpar las  las amígdalas. Con lo que la gran mayoría de casos se resolverá y desaparecerá el problema.

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